Importante victoria en la pequeña pero siempre dura cancha de los dirigidos por Gustavo Coleoni, que esperaban a este partido con el entusiasmo de considerarlo un clásico, importancia no correspondida por la hinchada del gallito
Y finalmente el interzonal por la fecha 37 de la temporada 2024 de la Primera Nacional, quedó en manos del Deportivo Morón, que así logra arribar a los 40 puntos cosechados, en una campaña que hace rato ingresó en el terreno de un pronto y necesario olvido.
Así las cosas, en esta oportunidad la suerte estuvo claramente de lado de los dirigidos por César Monasterio, mientras que jugadores y parcialidad de San Miguel masticaron la bronca por la enorme cantidad de oportunidades claras de gol que se le presentaron a lo largo del partido, y que no supieron aprovechar. Algunas de las cuales fueron abortadas por la excelente actuación del arquero visitante, Agustín Rufinetti, clara figura de Morón en particular durante los primeros 45 minutos. Tiempo en el cual, además, la fortuna para el gallo vino acompañada por el impecable golazo que convirtió la otra figura y ya estandarte de garra y sacrificio en el albirrojo, Mariano Bracamonte, quien clavó un remate alto y contra un palo, inatajable para el golero del local, por intermedio de la ejecución de un tiro libre en los últimos minutos del primer tiempo.
Con esa ventaja, el gallo se fue al vestuario, y su entrenador acertó y fue previsor de lo que se vendría en la segunda parte, por eso no titubeó en armar una línea de 5 defensores y plantear una «resistencia» al vendaval que, en efecto, descargó San Miguel en busca del empate. Los cambios introducidos por Monasterio tendieron a garantizar la defensa de su propio arco. No obstante ello, San Miguel siguió dilapidando numerosas ocasiones y desbordes que derivaban en sofocones en el área del gallo, si bien éstos también pudieron haber ampliado el resultado en alguna contra, aprovechando los espacios que dejaba el equipo local, masivamente volcado al ataque. Pero los números mandan, la campaña habla por sí sola, los 27 goles concretados en 37 fechas son una respuesta elocuente para entender porqué Morón no consiguió rematar el partido en alguno de esos contragolpes. La falta de gol ha sido una de sus más alarmantes características a lo largo de toda la temporada. Allí habrá que trabajar seriamente pensando en el 2025…
Pero lo concreto es que Deportivo Morón ganó en San Miguel. Una alegría para su sufrida y seguidora parcialidad, un desahogo para su plantel y cuerpo técnico, por haber hecho buenas actuaciones y sumado tanto en Mataderos como en el «clásico» de ayer, y si bien al local se le pueden reconocer merecimientos para haber merecido otro resultado, la estrategia a la que apeló el cuerpo técnico del gallo para el segundo tiempo, termino dándole el resultado esperado. Y la alegría y los tres puntos se trasladaron al corazón del oeste, volviendo a poner las cosas en su lugar en el rico historial contra el «trueno verde».
A continuación compartimos las notas realizadas por Javier Vega una vez finalizado el cotejo: