El pasado viernes 26 tuvo lugar la señalización de un nuevo Sitio de Memoria, en este caso en la localidad de Haedo, exactamente en el lugar donde funcionó la imprenta del Partido por la Victoria del Pueblo, en el exilio de su Uruguay natal, y que fuera atacado el 26 de septiembre de 1976 en el marco del Plan Cóndor.
Cuando la Memoria prevalece y las emociones se estrechan en interminables abrazos, los fascismos pierden potencia y se recluyen en sus gruñidos cloacales de ayer y hoy.
La intersección de Emilio Castro y Enrique Del Valle Iberlucea fue la esquina donde se congregaron centenares de compatriotas y hermanos de la República Oriental del Uruguay, para dar un muy emotivo homenaje a trabajadores gráficos, militantes políticos del Partido por la Victoria del Pueblo de nuestro vecino país oriental, desaparecidos durante la última dictadura cívico-militar-empresarial que asoló nuestra nación entre 1976 y 1983.
Esta señalización se concretó gracias a la iniciativa conjunta del área de Derechos Humanos del mencionado Partido por la Victoria del Pueblo (PVP), la Federación Gráfica Bonaerense y el propio Estado local.
La actividad contó con numerosas presencias de funcionarios municipales, delegados de la Federación Gráfica Bonaerense, vecinos y vecinas de la zona, representantes de organismos de Derechos Humanos y hasta se dieron cita el Embajador, Diego Canepa Baccino, y la Cónsul General del Uruguay en Buenos Aires, Lilian Alfaro.
Un acontecimiento de máxima relevancia, desarrollado con la calidez y la sencillez que dan justo tributo a trabajadores que lucharon contra las tiranías de aquellos años tan nefastos donde imperaba el Plan Cóndor, como siempre, apuntalados, asesorados y en algunos casos hasta financiados por el país de aires imperiales de América del Norte.
Se sucedieron varios testimonios, a cual más emotivo, que incluyó la palabra de un compatriota uruguayo, Sandro Soba, cuyo padre fue una de las víctimas de aquel operativo, vivía y trabajaba en la imprenta ubicada en esa casa en cuestión, y continúa desaparecido hasta la actualidad. Finalmente hizo uso de la palabra el intendente municipal, Lic. Lucas Ghi. A continuación, sintetizamos algunos de sus conceptos y facilitamos el video con su discurso completo.
«Esto es parte de un compromiso y una ratificación de un testimonio… en aquellos años se decidió qué se podía y qué no se podía hacer, y se avanzó sobre la vida de compañeros y compañeras, que acá estamos honrando (…) asumir aquel legado fielmente, es pelear como ellos y ellas lo hicieron, desde el lugar que toque, para tratar de llevar adelante ese modelo de sociedad que esos compañeros pretendían», exhortó.
Luego continuó Ghi trazando una especie de recorrido genealógico y advirtiendo sobre limitaciones y desafíos que nos viene trazando el sistema democrático hasta nuestros días: «Superadas las dictaduras, pensamos que las democracias traían justicia social, independencia, soberanía, todas las banderas que son tan caras para el movimiento nacional, popular, latinoamericano y varios años después nos damos cuenta de que eso no fue así: con la democracia sola no alcanza. Hoy estamos sumidos en una escena injusta y cruel, con mecanismos más sofisticados y menos groseros, pero igual de perversos que los de aquellos años».
«Esa democracia que pareció traernos todas las respuestas, parece que año tras año nos aleja más de las utopías. Nos pone desafíos cada vez más complejos de superar. Junto a otros pueblos latinoamericanos, vamos viendo de qué manera avanzamos hacia esquemas de mayor equidad, distribución justa de los beneficios del esfuerzo colectivo, y garantizarle a nuestros pibes y pibas que puedan vivir un presente de dignidad (…) el enemigo hoy día aparece más difuso, con esa capacidad siniestra de convertir en aliados a sectores que deberían estar en la vereda de enfrente. Sin embargo, logra niveles de consenso que son inusitados» lamentó.
Finalmente, esbozó su apuesta siempre por la esperanza: «Debemos avanzar siempre hacia un modelo de justicia social. Sin formalismos, con alegría. Esa alegría que es hija de un movimiento colectivo que asume el desafío como imperativo ético de la etapa histórica en la que es protagonista».
Muy bien recordar todos esos hechos que hemos sufrido, con los que el neoliberalismo (las dictaduras militares, Ménem, Macri y ahora Milei) nos ha hundido en las profundidades del infierno, para robarnos todo,